• El Dr. Richard Johnson, profesor de medicina en la Universidad de Colorado, ha investigado a fondo acerca de la relación entre el consumo excesivo de fructosa y los niveles elevados de ácido úrico e hipertensión
• La fructosa se metaboliza de forma muy diferente en su cuerpo que la glucosa, dando como resultado la producción de subproductos tóxicos (como el ácido úrico) que son similares a los producidos por el metabolismo del alcohol, con efectos dañinos similares en su hígado, la glucosa en realidad acelera la absorción de fructosa
• Los niveles elevados de ácido úrico han sido relacionados durante mucho tiempo con la gota, pero estudios recientes revelan que también están relacionados con muchos otros problemas de salud graves, incluyendo hipertensión, enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, enfermedad del hígado graso y enfermedad renal
• Lo mejor es checarse los niveles de ácido úrico de forma regular, el rango ideal es de 3 a 5.5 mg por dl y si sus niveles son más altos que eso, trate de reducir su consumo de azúcar
• Usted puede “reiniciar” su metabolismo en tan sólo dos semanas por medio de la eliminación de todas las fuentes de azúcar de su alimentación

Revisamos a fondo la investigación que relaciona la fructosa con niveles altos de ácido úrico y la hipertensión del Dr. Richard Johnson, profesor de medicina en la Universidad de Colorado, en donde dirige la división renal y está a cargo de trasplante e investigación de la presión arterial. Él también escribió uno de los mejores libros en el mercado sobre los peligros de la fructosa, titulado The Sugar Fix y su libro más reciente The Fat Switch.

Aproximadamente el 70 por ciento del trabajo del Dr. Johnson consiste en investigaciones y durante muchos años ha estado estudiando los efectos de la fructosa en el sistema metabólico en animales y cultivo de celular, así como en estudios clínicos. Gran parte de su investigación se ha enfocado en cómo está relacionada la fructosa con la obesidad, presión arterial alta, enfermedad renal, hígado graso y otros problemas de salud.

El Dr. Johnson habla de cómo el ácido úrico en la sangre puede causar estragos en su presión arterial, producción de insulina e incluso en la función renal.

Sin embargo, el no comenzó enfocándose en la fructosa. Comenzó cuando se dio cuenta de que el ácido úrico es uno de los principales componentes de la obesidad, presión arterial alta y enfermedad renal. De hecho, él descubrió que el 90 por ciento de los adolescentes obesos recientemente diagnosticados con presión arterial alta tuvieron niveles elevados de ácido úrico. Él fue capaz de normalizar la presión arterial en el 87 por ciento de esos adolescentes por medio de la reducción de los niveles de ácido úrico.

La pregunta fue: ¿qué aumenta los niveles de ácido úrico?

Se ha sabido que la carne y los alimentos ricos en purinas pueden elevar los niveles de ácido úrico, pero resulta que una de las formas más potentes para elevar los niveles de ácido úrico es el consumo excesivo de fructosa. Probablemente ya sabe que la fructosa es un azúcar, pero lo que tal vez no sabrá es que es claramente diferente a otros tipos de azúcar, ya que se metaboliza en su cuerpo por medio de vías específicas que difieren a las de la glucosa. De hecho, la fructosa normalmente genera ácido úrico minutos después de la ingestión.

El azúcar en realidad lo hace consumir más azúcar. Consumir azúcar desencadena la producción de opioides naturales del cerebro- un factor clave en la adicción. Su cerebro esencialmente se vuelve adicto a esa liberación de opioides inducida por el azúcar, no muy diferente a otros tipos de adicciones como a la morfina o heroína. Mientras más consume, más quiere. Este ciclo vicioso es en gran parte causado por el consumo excesivo de azúcar.

Pero vamos a dar un paso atrás y veamos qué es el ácido úrico y cómo está relacionado con el consumo de fructosa.

El ácido úrico es un producto de desecho normal que se encuentra en su sangre. Los niveles elevados de ácido úrico normalmente están relacionados con la gota, pero se ha sabido durante mucho tiempo que las personas con presión arterial alta, sobrepeso y personas con enfermedad renal, muchas veces también tienen niveles elevados de ácido úrico.

Antes se pensaba que el ácido úrico era secundario en estos problemas de salud y no la causa- pero la investigación del Dr. Johnson indica que podría tener uno de los papeles principales en el desarrollo de estos problemas de salud, dejando a un lado el papel secundario que se pensaba tenia, cuando los niveles en su cuerpo alcanzan 5.5 mg por dl o más.

A este nivel, el ácido úrico está relacionado con un mayor riesgo de desarrollar presión arterial alta, así como diabetes, obesidady enfermedad renal.

Curiosamente, el ácido úrico funciona tanto como antioxidante como pro-oxidante una vez que se encuentra dentro de sus células. Así que, si se reduce demasiado los niveles de ácido úrico, se pierden sus beneficios antioxidantes. Pero en cambio, si sus niveles se encuentran muy altos, también tienden a aumentar significativamente dentro de sus células, en donde actúa como pro-oxidante.

El Dr. Johnson cree que el rango ideal de ácido úrico es entre 3 y 5.5 mg por dl. Como lo mencioné anteriormente, superar este rango aumenta su riesgo de desarrollar todos los problemas de salud también mencionados anteriormente. En la siguiente declaración, el Dr. Johnson explica que tan relacionados están los niveles de ácido úrico con el consumo de fructosa:

“Si usted le da fructosa a los animales, desarrollan diabetes, hipertensión, obesidad e hígado graso. Y en la mayoría de estos problemas de salud, si se reducen los niveles de ácido úrico, podemos prevenir muchos de ellos, aunque no por completo. Así que la reducción de los niveles de ácido úrico parece beneficiar algunos de los mecanismos por los cuales la fructosa causa las enfermedades.

Así que un punto sumamente importante es que si usted toma dos animales y alimenta a uno con fructosa y al otro con la misma cantidad de calorías pero en forma de dextrosa o glucosa, el animal alimentado con fructosa es el único que desarrollará obesidad, resistencia a la insulina, hígado graso, niveles elevados de triglicéridos, signos de inflamación, enfermedad vascular y presión arterial alta .”

Este también es el caso de los seres humanos. Durante los últimos 20 años, hemos visto un dramático aumento de la enfermedad de hígado graso en todo el mundo y los estudios realizados por el Dr. Johnson y un grupo de investigadores de la Universidad Duke demostraron que las personas que desarrollan hígado graso consumen más refrescos y frutas e ingieren mucha más fructosa que la persona promedio en la comunidad.

¡Amigos, esto es exactamente lo que me apasiona y lo que quiero enseñarles a usted, los peligros de la fructosa! Estoy completamente convencido de que es una de las causas principales detrás del aumento masivo de sufrimiento innecesario de mala salud y muerte prematura.

Una de las personas que realmente me abrió los ojos y me enseñó mucho sobre este tema es el Dr. Robert Lustig, profesor de pediatría en la división de endocrinología en la Universidad de California en San Francisco.

No es ningún secreto que estamos consumiendo más azúcar que nunca antes en la historia. En 1700, la persona promedio consumía un kilo ochocientos gramos de azúcar al año. Para 1800, aumentó a ocho kiligramos. Para 1900, eran cerca de cuarenta kilogramos.

Actualmente, aproximadamente el 25 por ciento de todos los mexicanos consume más de 134 gramos de fructosa al día, esto de acuerdo con la investigación del Dr. Johnson. Ese tipo de consumo equivale a más de cuarenta y cinco kilogramos de azúcar al año. Y da la casualidad de que esta estadística encaja perfectamente con las estadísticas que demuestran que uno de cada 4 mexicanos es o pre-diabético o tiene diabetes tipo 2. Las fuentes principales de azúcar son el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF), la fruta y el azúcar de mesa.

Como recomendación estándar, le aconsejo mantener su consumo TOTAL de fructosa por debajo de los 25 gramos al día.

Sin embargo, para la mayoría de las personas sería bueno limitar el consumo de fructosa a 15 gramos o menos , ya que tiene prácticamente garantizado consumir de fuentes de fructosa “ocultas” de la mayoría de las bebidas y alimentos procesados que consuma.

Dado a que el 55 por ciento del JMAF es fructosa, un refrescode lata por sí solo excedería la cantidad permitida diaria. Es fácil ver que las personas que toman de tres a cuatro, exceden fácilmente los 100 gramos de fructosa al día.

Tome en cuenta que las frutas también contienen fructosa, y es mas peligrosa que tomar refresco, un factor es que las frutas enteras también contienen vitaminas y otros antioxidantes pero es mucha agua y fructosa. Los jugos, por otra parte, son casi tan dañinos como el refresco, porque un vaso de jugo está lleno de fructosa y ya ha perdido muchos antioxidantes.

Es importante recordar que la fructosa por sí sola no es tan mala ya que las frutas ciertamente son benéficas. Pero cuando se consumen altos niveles de fructosa, entonces se vuelve absolutamente devastadora para su bioquímica y fisiología. Recuerde que la dosis PROMEDIO de fructosa es de 70 gramos al día, lo que excede el límite recomendado en un 300 por ciento.

Así que por favor TENGA CUIDADO con su consumo de frutas. Simplemente DEBE entender que debido a que el JMAF es tan barato, lo añaden a prácticamente todos los alimentos procesados. Así que incluso si usted no toma refresco pero consume frutas, es muy fácil excederse de los 25 gramos gracias a la fructosa que se oculta en su alimentación.

Si usted es de los que llevan una alimentación prístina, le gustan los alimentos crudos y hace ejercicio, entonces podría ser la excepción y puede consumir más de este límite y aun así estar sano. Pero en mi experiencia ese es el caso de menos de uno en 1,000 personas y probablemente sea 1 en 10,000 personas. Así que por favor, tenga cuidado con la frutas que consume y guíese con nuestro Sistema de Alimentación Ancestral

El consumo de fructosa claramente causa resistencia a la insulina, mientras que la glucosa sola, no. Eventualmente, la resistencia a la insulina puede causar diabetes. Curiosamente, la glucosa en realidad acelera la absorción de fructosa. Así que cuando MEZCLA glucosa y fructosa, absorbe más fructosa que si la consumiera sola.

Este es un dato importante para las personas que quieren hacer un mejor esfuerzo para controlar su peso. Con la epidemia de obesidadpropagándose por el país- dos de cada tres personas tienen sobrepeso y una de cada tres es obesa- está bastante claro que la fructosa es el factor más importante detrás de esta epidemia.

En su libro, el Dr. Johnson revisa la efectividad de la reducción del consumo de fructosa para ayudar a prevenir o tratar la obesidad. Él ofrece tablas detalladas que muestran el contenido de fructosa en diferentes alimentos- una información base que no está disponible cuando trata de saber el contenido de fructosa en varios alimentos.

El contenido de fructosa de las frutas que incluí en este artículo lo saqué de su trabajo.

Los resultados de seguir las sugerencias en su libro están respaldados por una prueba clínica controlada, en la que personas con sobrepeso que hicieron su dieta tuvieron mejoras significativas en su peso y presión arterial. Reducir el consumo de azúcar en su alimentación puede ser difícil para algunas personas. Después de todo, el azúcar es tan adictivo como la cocaína. Pero es posible y en su libro, el Dr. Johnson ofrece una guía bastante útil para lograrlo.

Su dieta se baja es consumir muy poca fructosa durante dos semanas, que tienen un efecto de “reinicio” en su sistema. El azúcar activa sus propias vías y mientras más azúcar consume, más sensible se vuelve y más absorbe el cuerpo. Restringir el consumo de azúcar durante un periodo de tiempo, puede reducir el sistema metabólico hiperactivo que ha desarrollado y de esta forma puede comenzar desde el principio.

Vale la pena señalar que algunas alternativas que parecerían saludables para la mayoría de las personas contienen una buena cantidad de fructosa. El jarabe de agave, por ejemplo, es falsamente promocionado como “natural.” Está ALTAMENTE procesado y está compuesto por 80 por ciento de fructosa. El producto final no se parece en nada a la planta de agave original y prácticamente no tiene ningún valor nutricional. Para más información sobre el agave, por favor échele un vistazo a mi reporte que habla de este tema más a detalle.

Una alternativa mucho más segura es la miel de abeja.

Puede comprar miel de abeja como endulzante. Es 70 por ciento tan dulce como la sacarosa, por lo que terminará utilizando un poco más para obtener el mismo sabor dulce, pero vale la pena porque tiene azucares chiquitos que son monosacaridos y disacaridos que se absorben muy rápido en el cuerpo. Recuerde, la miel de abeja puede ser utilizada de forma directa por cada célula de su cuerpo y es mucho más segura que la fructosa que es un veneno metabólico.

Aunque esto es el comienzo, debe aprender a leer las etiquetas de los alimentos, de lo que he hablado en muchos otros artículos, de esta forma puede familiarizarse con el contenido de fructosa de todo lo que coma.

Créame, esta no será la última vez que hablemos de la fructosa o que escuchemos del trabajo del Dr. Johnson. Estoy comprometido con ayudarlo a tomar el control de su salud, por eso comparto esta valiosa información con usted, ya que puede cambiar radicalmente su salud para bien.

Su salud se ve amenazada por todas las direcciones. Estamos rodeados de toxinas ambientales, alimentos ultraprocesados, campos electromagnéticos, organismos transgénicos (OGM) subsidiados por el gobierno y una variedad de otros peligros. Es simplemente imposible protegerse a menos que cuente con información saludable de vanguardia.